La orquesta en la que trabajan 15 personas ha tenido que suspender 4 galas, de momento, debido al robo sufrido.

En la madrugada del pasado sábado al domingo, concretamente a las 4, una furgoneta de la Orquesta Evasión volvía de hacer una gala en Cornellà y hacían noche en el albergue de la Fundación Catalana de l’esplai, para dirigir-se al bolo que tenían programado ese domingo en Hospitalet.

A las 6 de la mañana llegaron los montadores con el camión del grupo musical y también se dirigieron a sus habitaciones del albergue para dormir. Los vehículos quedaron aparcados en la calle, pues según ha declarado a El Prat al día un portavoz del grupo, «nadie del albergue nos informó que disponían de aparcamiento»

La terrible sorpresa llegó cuando el domingo a las 12 de la mañana fueron a iniciar el camino hasta Hospitalet y al ir a montarse en sus vehículos vieron que les habían roto los vidrios de la furgoneta robándoles todos los instrumentos.

En total les robaron : un Saxofón tenor Yamaha modelo YTR480, un Saxofón alto modelo Yamaha YAS280, una Guitarra eléctrica de zurdos marca Patrick Eggle modelo Berlín EVO, una Maleta con transformadores, un Teclado Korg M1, un teclado Keytar Roland AX7, un bajo Sadowsky 5 metro modern (color marrón), una trompeta YAMAHA 8335s plateada, 3 petacas Sennheiser inalámbricas para guitarra,1 petaca monitores LD, 1 microfono Sennheiser, una trompeta, 4 monitores in ear Sennheiser, Guitarra eléctrica S1.6HLB – LIME BURST MATTE, una Guitarra eléctrica Ibanez AZ 224F BT, un micrófono Sennheiser e950, un Micrófono Shure sm58 y un Clarinete BUFFET

A lo desagradable del robo de sus herramientas de trabajo y destrozo de su vehículo le siguió un intento de extorsión , pues un individuo se dirigió a ellos y les exigió 6.000 euros para devolverles los instrumentos.

Los miembros de la orquesta no cedieron al chantaje y se dirigieron a la prefectura de @mossos cercana y ahí afirman que sufrieron otra decepción, pues aseguran que la policía autonómica no quería desplazarse a ver la furgoneta y les decían que la llevasen allí, aunque finalmente , ante la insistencia de los denunciantes fueron a lugar de los hechos. «No lo pusieron muy fácil para denunciar el robo, quizás para que no aumenten las estadísticas»

La orquesta en la que trabajan 15 personas no puede cuantificar el importe de lo robado, pues al valor de los instrumentos hay que sumar las galas suspendidas que de momento son 4, aunque con seguridad serán más. «Nos han partido por la mitad la gira».

A los miembros del grupo musical les llama la atención que el robo no se produjo hasta que llegó el camión con los montadores «Como si nos estuvieran esperando y supieran cuántos éramos»